como abrir una botella sin sacacorchos

10 formas efectivas de abrir una botella sin sacacorchos

Aquellos que disfrutan del buen vino, es posible que en algún momento se hayan enfrentado a este contratiempo: querer abrir una botella y no contar con un sacacorchos a mano. Sin embargo, no hay que preocuparse, ya que existe más de una manera de lograrlo sin la ayuda de este instrumento. A los amantes del vino, les mostramos que hay técnicas alternativas para descorchar una botella, que van más allá de simplemente empujar el corcho hacia abajo.

Trucos para descorchar una botella de vino sin necesidad de un sacacorchos

Si eres de los que prefieren los métodos manuales, aquí te presentamos dos opciones para abrir una botella de vino sin necesidad de un sacacorchos. Pero ojo, ¡requieren de bastante esfuerzo!

La primera opción consiste en atornillar un tornillo largo y limpio en el corcho hasta que sobresalgan unos dos centímetros. Luego, con la parte trasera de un martillo, bloquea el tornillo y tira para sacar el corcho. Es casi como usar un sacacorchos, ¿verdad?

Otra alternativa es envolver el fondo de la botella en una toalla, ponerla boca abajo entre tus piernas mientras estás sentado y darle unos golpes con un zapato. Eso sí, ¡puede llevarte mucho tiempo! Pero no te preocupes, para cuando el corcho esté a punto de salir, puedes recurrir a un sacacorchos para terminar el trabajo.

Pero si prefieres algo más sencillo, te recomendamos sacrificar una de tus perchas de alambre. Solo tienes que enderezar la punta de la percha y hacer una pequeña curva en la punta formando un anzuelo. Introduce el alambre en la botella junto al corcho, asegurándote de que esté pegado al borde de la botella y el gancho apunte hacia adentro. Luego gira el alambre unos 90 grados y tira hacia arriba para liberar el corcho. Puedes ayudarte con unos alicates si el gancho parece atascado. Eso sí, te recomendamos que utilices una percha que no necesites.

Consejos para abrir una botella de vino sin tener un abridor

Extracción de un corcho resistente: diferentes métodos

Si te encuentras en la situación de tener que abrir una botella de vino con un corcho que se resiste a salir, no te preocupes, ¡tenemos algunas opciones para ti!

Para empezar, necesitarás un destornillador, un tornillo y un martillo. Desde luego, el destornillador debe ser adecuado para el tamaño del tornillo y este, preferiblemente, debe ser de suficiente longitud. Comienza por introducir el tornillo en el centro del corcho con la ayuda del destornillador, dejando unos pocos centímetros libres sobre el tapón. Luego, coloca la parte trasera de un martillo con sacaclavos, conocida como "garras", abrazando el tornillo y levanta con cuidado la herramienta para extraer el corcho. En caso de no tener un martillo, también puedes usar unos alicates para quitar el tornillo.

Ganchos de tornillo para una extracción más sencilla

Si tienes a mano un tornillo con un gancho circular en la punta, será aún más fácil sacar el corcho. Sigue el mismo procedimiento, introduciendo el tornillo en el centro del corcho y dejando el gancho sobre el tapón. Luego, inserta un objeto como un bolígrafo en el gancho y tira en sentido opuesto para desprender el corcho con facilidad.

Otra opción: el cuchillo con punta afilada

Si no tienes a mano ni un martillo ni tornillos con ganchos, no te preocupes, ¡un cuchillo puede ser una buena alternativa! Elige uno de buena calidad, de mesa y con una punta afilada y sierra. Con cuidado, introduce la punta del cuchillo en el centro del corcho y luego comienza a girarlo. Si el corcho ofrece mucha resistencia, también puedes girar la botella con una mano y mantener firme el cuchillo con la otra, hasta que empiece a salir. Continúa girando y, al mismo tiempo, elevando el cuchillo suavemente como si estuvieras haciendo rosca, para que el corcho salga más fácilmente.

Desvelando los secretos cómo destapar una botella de vino sin necesidad de un sacacorchos

Hay diferentes formas de abrir una botella de vino sin usar un sacacorchos. Una de las más populares es la del zapato. Para hacerlo, coloca la parte inferior de la botella dentro de un zapato y, con una mano en la botella y otra en el zapato, golpea fuerte y secamente contra una pared. La presión empujará el corcho hacia afuera. Siempre es mejor utilizar un zapato duro con suela de goma para amortiguar el golpe y evitar romper la botella.

Otra opción es utilizar un clavo. Este era el método utilizado antes de la invención del sacacorchos. Consiste en clavar en espiral un tornillo en el corcho y luego utilizar un tenedor para hacer palanca y extraerlo.

Si tienes maña, puedes probar con tus llaves de casa. Clava una llave (preferiblemente una dura) en diagonal en el corcho y haz palanca hacia arriba con cuidado para empujar el corcho fuera. Es importante hacerlo con suavidad para evitar romper el corcho.

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